Truco 1. Humedecer y cepillar
¿Cuándo? Cuando queremos poner a punto nuestros zapatos de ante.
¿Qué necesito? Un cepillo de dientes o uñas, jabón de pH neutro (sin perfumes) y agua.
¿Cómo? Mojar el cepillo en agua con jabón, humedecer y cepillar el calzado realizando movimientos circulares. ¡Atención! Humedecer no quiere decir empapar el calzado en agua con jabón. Lo ideal es cepillar primero en un sentido y luego en el otro para que el ante quede suelto.
Truco 2. Polvos de talco
¿Cuándo? Cuando tu calzado de ante tiene alguna mancha de grasa.
¿Qué necesito? Polvos de talco, harina o bicarbonato (para absorber la grasa), un cepillo de dientes o uñas, jabón pH neutro y agua.
¿Cómo? Lo primero es quitarse el zapato que acaba de mancharse de grasa y ponerlo bocabajo para que la grasa no penetre más y no se expanda. Después hay que echarle polvos de talco, harina o bicarbonato para que absorban la grasa que ha quedado. Pasados 15 minutos toca cepillar toda la superficie de ante, siempre en el sentido del pelo y sin apretar. Si la mancha de grasa ha dejado marca hay que poner en práctica el truco 1: mojar el cepillo de uñas o dientes en agua con jabón neutro, aunque en este paso podemos sustituir el jabón por el amoníaco, humedecer y cepillar el calzado realizando movimientos circulares, toda la superficie, no solo la zona donde se encuentra la mancha. Siempre debemos de dejar secar los zapatos al aire libre y evitar la exposición al sol.
Truco 3. Goma de borrar
¿Cuándo? Cuando queremos disimular alguna rozadura.
¿Qué necesito? Una goma de borrar como las que usábamos en el colegio.
¿Cómo? Como si fuera a borrar una palabra escrita a lápiz en un cuaderno, pero con más delicadeza. Hay que pasar la goma solo por las zonas que tienen rozadura. Después conviene cepillar todo el zapato para que quede toda la superficie igualada.
Vale, y ahora que están limpios, ¿qué hago? Hay que dejarlos secar con una horma que estiren el zapato (Sino tenemos horma, usaremos trapos o cualquier otra cosa que ejerza presión para rellenarlos). Esto evita que se deformen con la humedad. Para que el lavado de cara les dure más conviene guardarlos en una bolsa de tela o papel que los proteja del polvo. Recomendamos el uso de la horma y ponerla siempre en el interior de los zapatos de ante antes de guardarlos, conservarán la forma durante más tiempo.
¡Importante! Después de limpiar nuestros zapatos de ante hay que dejar secar al aire libre y sin exposiciones al sol o al calor.